jueves, 1 de abril de 2010

martes, 22 de julio de 2008

Dalí y su amigo F. García Lorca

ODA A SALVADOR DALI (F. García Lorca)

¡Oh Salvador Dalí, de voz aceitunada! No elogio tu imperfecto pincel adolescente ni tu color que ronda la color de tu tiempo, pero alabo tus ansias de eterno limitado.

Alma higiénica, vives sobre mármoles nuevos. Huyes la oscura selva de formas increíbles. Tu fantasía llega donde llegan tus manos, y gozas el soneto del mar en tu ventana.

El mundo tiene sordas penumbras y desorden, en los primeros términos que el humano frecuenta. Pero ya las estrellas ocultando paisajes, señalan el esquema perfecto de sus órbitas.

La corriente del tiempo se remansa y ordena en las formas numéricas de un siglo y otro siglo. Y la Muerte vencida se refugia temblando en el círculo estrecho del minuto presente.

Al coger tu paleta, con un tiro en un ala, pides la luz que anima la copa del olivo. Ancha luz de Minerva, constructora de andamios, donde no cabe el sueño ni su flora inexacta.

Pides la luz antigua que se queda en la frente, sin bajar a la boca ni al corazón del hombre. Luz que temen las vides entrañables de Baco y la fuerza sin orden que lleva el agua curva.

Haces bien en poner banderines de aviso, en el límite oscuro que relumbra de noche. Como pintor no quieres que te ablande la forma el algodón cambiante de una nube imprevista.

El pez en la pecera y el pájaro en la jaula. No quieres inventarlos en el mar o en el viento. Estilizas o copias después de haber mirado con honestas pupilas sus cuerpecillos ágiles.

Amas una materia definida y exacta donde el hongo no pueda poner su campamento. Amas la arquitectura que construye en lo ausente y admites la bandera como una simple broma.

Dice el compás de acero su corto verso elástico. Desconocidas islas desmienten ya la esfera. Dice la línea recta su vertical esfuerzo y los sabios cristales cantan sus geometrías.

3 GRANDES obras

El torero alucinógeno (1969), Esta pintura de proporciones extraordinarias (4 x 3 metros). Dalí se pone a tono con temas de la época, táles como el LCD y sus alucinaciones, pero Dalí no necesitó tomarlo, el LCD podia haber probado de Dalí. Encontramos una combinación de varios elementos resultantes de su método paranoico-crítico. En la bahía casi imperceptiblemente y fuera de contexto hay una mujer en una balsa amarilla. Preocupaba al pintor las consecuencias para Cabo de Creuss del creciente turismo, aunque por otra parte pensaba que las rocas terminarían a la larga venciendo a los visitantes y destruyendo la basura que estos dejaban por todas partes.
Sueño causado por el vuelo de una abeja alrededor de una granada un segundo antes de despertar (1944), Oleo sobre tabla, 51 x 40,5 cm. Dalí ilustró otro de los descubrimientos de Freud. El dijo: ”...un sueño típico con un tema largo, consecuencia del despertar causado por un accidente repentino”. Cisnes reflejando elefantes (1937),
Oleo sobre tabla, 51 x 77 cm. En este cuadro vemos claramente el método paranoico-crítico al ver aparecer elefantes en el reflejo de los cisnes.

jueves, 17 de julio de 2008

"Pinté un cuadro profético de la muerte del Führer..."

"Entretanto, Hitler hitlerizaba, y un día pinté a un ama de cría nazi haciendo punto, sentada por inadvertencia en un gran charco de agua. ("El espectro y el fantasma 1933-1934, óleo sobre tela. 100 x 73 cm)

Ante la insistencia de algunos de mis mas íntimos amigos surrealistas, tuve que borrar de su brazal la cruz gamada. Jamás hubiera sospechado la emoción que esta cruz suscitaba. Yo estaba hasta tal punto obsesionado que concentré mi delirio en la personalidad de Hitler, que en mi fantasia se me aparecía siempre transformado en mujer. Gran número de liezos que pinté en aquella época fueron destruidos al invadir Francia el ejercito alemán. A mí me fascinaban las caderas blandas y rollizas de Hitler, siempre tan bien enfajadas en su uniforme. Cada vez que empezaba a pintar la correa de cuero que, partiedo de su cintura, pasaba al hombro opuesto, la blandura de aquella carne hitleriana, comprimida bajo la guerrera militar, suscitaba en mi tal éxtasis gustativo, lechoso, nutritivo y wagneriano que mi corazón palpitaba violentamente, una emoción tan rara en mí que ni siquiera me ocurría en la practica del amor. La carne rolliza de Hitler, que me la imaginaba como la mas divina carne de una mujer de cutis blanquísimo, me tenía realmente fascinado. Conciente, a pesar de todo, de la naturaleza psicopatológica de semejante sucesión de arrebatos, yo me repetía, arrobado, a mis propios oídos:

-¡Esta vez sí, esta vez creo que rozo por fin la auténtica locura!

Y a Gala:

-Tráeme ámbar disuelto en aceite de espliego y los pinceles mas finos del mundo. Nada será lo bastante delicado como para pintar, a la manera de Meissonier, el delirio supernutritivo, el éxtasis a un tiempo místico y carnal que se adueña de mí cuando emprendo la tarea de reproducir sobre mi tela la huella de esta correa de flexible cuero sobre la carne de Hitler.

No cesaba de repetir a quien quería oírme que mi arrebato hitleriano era de carácter apolítico, que la obra que yo alunbraba en torno a la imagen feminizada del Führer era de un equívoco escandaloso, que esas reproducciones estaban impregnadas de tanto humor negro como las de Guillermo Tell o Lenin, pero, por más que repitiera todo esto a mis amigos, no servía de nada. Esta nueva crisis que asaltaba mi pintura se hacía cada vez massospechosa entre los cículos del surrealismo. Las cosas empeoraron cuando se difundió la noticia de que a Hitler le gustaban ciertos elementos de algunos de mis cuadros, como los cisnes, la soledad, la megalomanía, el wagnerianismo y el jeronimoboschismo.

Dados mi temperamento y mi espíritu de contradicción congénito, la situación teniía forzosamente que empeorar. Pedí a Breton que convocara con toda urgencua a nuestro grupo en sesión extraordinaria para discutir la mística hitleriana desde el punto de vista de lo irracional netzscheano y anticatólico. Confiaba en que el aspecto anticatólico de la discusión seduciriía a Breton. además, yo consideraba a Hitler como a un masoquista integral, poseído por la idea fija de desencadenar una guerra por el gusto de perderla luego heroicamente, y que, de hecho, se disponía a realizar uno de los getos gratuitos que tanta admiración provocaban en nuestro grupo. Mi insistencia en entrever la mística hitleriana desde el punto de vista surrealista, al igual que la de dotar de un sentido religioso el contenido sádico del surrealismo, ambas cosas agravadas por las revelaciones de mi método de análisis crítico-paranoico que tendía a anular el automatismo y su inherente narcisismo, me condujeron a una serie de desavenencias y rencillas intermitentes con Breton y sus amigos. Estos últimos, por otra parte, empezaron -de un modo alarmante a para el líder del grupo- a dudar entre él y yo. Pinté un cuadro profético de la muerte del Führer. Lo titulé "El enigma de Hitler", lo que me valió la excomunión de los nazis y el aplauso de los antinazis, por mas que este lienso -como, por otra parte, toda mi obra, y eso lo proclamaré hasta el fin de mis días- estuviera desprovisto de todo significado político consciente. En el momento en que escribo estas líneas, confieso que yo mismo no he desifrado todavía este famoso enigma..." Diario de un genio, Salvador Dalí 1952

domingo, 13 de julio de 2008

Los bigotes de Nietzsche

"En tres días terminé de asimilar y digerir a Nietzsche. Finalizada tan opípara comida, sólo me faltaba abordar un detalle de la personalidad del filósofo, un último hueso que roer: ¡sus bigotes! Mas tarde, Federico García Lorca, fascinado por los bigotes de Hitler, proclamaría que "los bigotes constituyen la constante trágica del rostro del hombre". ¡Hasta en los bigotes iba yo a superar a Nietzsche! Los mios no serian deprimentes, catastróficos, repletos de música wagneriana y de brumas. Serían afilados, imperialistas, ultrarracionalistas y apuntarían al cielo, como el misticismo vertical, como los sindicatos verticales españoles." Diario de un genio, Salvador Dalí.

Tal vez sorprenda la expresión "fascinado por los bigotes de Hitler" pero no seria solo García Lorca quien se fascinara con algo de Hitler, el mismo Dalí se verá en problemas por incluir su imagen en cuadros y por insitir al movimiento surralista en "entrever la mística hitleriana desde el punto de vista surrealista..." Luego sitaré pensamientos y explicaciones sobre el tema según Dalí, pero antes solo dejar en claro, para no probocar el repudio de quien no conozca mas sobre el pintor, que lejos estaría de ser un fascista como muchos pueden haberlo catalogado, Él solo abstraía las imágenes del contenido o simplemente podía usarlas sin compartir necesariamente las ideologías (que tal vez es lo mismo, pero vale la pena aclarar).

sábado, 12 de julio de 2008

Nace Salvador Dalí

11 de mayo de 1904... nace el gran SALVADOR DALI Nace en la calle Monturiol de Figueras. Le ponen el mismo nombre que a otro hijo nacido diez años antes y que murió en 1901 a la edad de 7 años de meningitis. Este hecho será traumático en su vida, esto le crea gran desestabilidad emocional al tener que llevar de pequeño flores a una tumba que tiene su nombre. El 24 de enero de 1989 muere Salvador Dalí en su castillo de Pubol y es enterrado al día siguiente en el teatro-museo de Figueras. Pasaron muchas cosas entre ese 11 de mayo en Figueras y ese 24 de enero en su castillo de Pubol... tantas que hasta logro tener un castillo. Pasaron muchos cuadros... muchisimos cuadros, muchos libros, algunas películas, varios problemas, entrevistas, amores, amigos, tantas cosas como eran necesarias que pasaran para conformar una vida única, la vida del ultimo genio. Este intentará ser un humilde medio para mostrar algunas de las maravillas creadas y escritas por Dalí, muchas de las cuales desde 1929 tendrán una inspiración monotemática, Elena Ivanovna Diakonova... o mas conocida como Gala Para comenzar a entender las maravillas de Dalí les dejo un cuadro pintado por El con apenas 13 o 14 años..."Viejo crepuscular"